Por Rodrigo Suárez
Frederick Matthias Alexander decía: «Be happy to be wrong» (algo así como «alégrate de estar mal»). Como yo lo entiendo, esto no quiere decir que no sintamos tristeza o frustración cuando nos salen mal las cosas, esas emociones son útiles porque nos motivan a hacer las cosas de una forma que satisfaga nuestras necesidades. Más bien Alexander decía la frase porque nos suelen educar a creer que es vergonzoso hacer las cosas mal. Hemos aprendido a juzgarnos y a sentirnos culpables cuando nos equivocamos.