Por Rodrigo Suárez Hoffman
Expresarle claramente tus sentimientos a alguien (sin responsabilizar al otro por tus sentimientos) puede en muchos casos ayudar a que la persona comprenda y le importen tus necesidades. Ejemplos: “Me estoy dando cuenta de que estoy algo decepcionado, yo tenía la ilusión de que nos viéramos hoy”. “Estoy estresado porque es importante para mí llegar a tiempo”, “Estoy confundo, me gustaría tener más claridad de qué es lo que quieres”.
Ese es uno de los motivos por los que es útil versarnos en el vocabulario de los sentimientos. ¿En este momento, por ejemplo, cómo te sientes? ¿Te sientes apática?… ¿Vigoroso?.. ¿Abierta?.. ¿Sensible?… ¿Disgustado?… ¿Sientes rabia?…