Por Rodrigo Suárez Hoffman
Cuando te sientes triste, confundido, enojado, culpable o preocupado, tus sentimientos te están avisando de tus necesidades. ¿Qué necesitas? ¿Claridad? ¿Comprensión? ¿Consideración? ¿Protección? ¿Contribuir a que alguien cercano a ti esté mejor? Si tu respuesta es “Necesito que mi hijo haga lo que le digo” o “necesito ganarme la lotería”, no es el tipo de respuesta que estaba buscando, yo me refiero a necesidades humanas universales, porque eso abrirá tus opciones: existen muchas formas distintas de satisfacer tu necesidad de aceptación o tu necesidad de apoyo.